miércoles, 9 de diciembre de 2020

15 MAPUCHE HAN SIDO ASESINADOS POR GOBIERNOS "DEMOCRÁTICOS" DE LAGOS, BACHELET Y PIÑERA.

 

(Texto tomado del diario "la izquierda" de noviembre de 2018).



PUEBLO MAPUCHE

15 mapuches asesinados en los gobiernos de la Concertación y la derecha

Alrededor de 15 mapuches fueron asesinados durante los gobiernos de Ricardo Lagos, Michelle Bachelet y Sebastián Piñera.

Viernes 16 de noviembre de 2018 | 09:30

Desde el año 2001 comienza una oleada de asesinatos a comuneros mapuche a manos de agentes policiales y civiles, estos crímenes se asocian a una política institucional en donde la responsabilidad los gobiernos de la Concertación han modificado los métodos represivos y criminalizadores contra el pueblo mapuche con las leyes que dejó la dictadura militar de Pinochet.

A continuación, reproducimos el listado de los 14 mapuches asesinados por los gobiernos de la "democracia", publicado en el Periódico Werkén.cl

Bajo la presidencia de Ricardo Lagos

1. Agustina Huenupe Pavian (2001)
Hermana de Mauricio, ambos fueron asesinados en el sector de Cañicú.

2. Mauricio Huenupe Pavian (2001)
Según el relato del Werkén Pedro Suarez: un grupo de colonos habría atacado la casa donde se encontraba una veintena de personas, la mitad de ellos niños. Agustina y Mauricio eran activos dirigentes a favor de las recuperaciones de terrenos y opositores a la instalación de hidroeléctricas.

3. Jorge Antonio Suarez Marihuan (2001)
Jorge Suárez Marihuan, hermano del Lonko de la comunidad de Malla Malla en el Alto Bío Bío, quien fue encontrado muerto el 11 de diciembre de 2001 en la ribera del río Queuco, luego de permanecer desaparecido por 6 días. La comunidad denunció una golpiza por parte de un grupo de desconocidos, que habrían actuado en complicidad con la policía.

4. Edmundo Alex Lemunao Saavedra (2002)
En el 2002 fue asesinado el comunero Alex Lemún Saavedra, durante la ocupación del fundo Santa Elisa, propiedad de la Forestal Mininco. El mayor Marco Aurelio Treuer utilizó una escopeta Winchester calibre 12.

5. Julio Alberto Huentecura Llancaleo (2004)
En 2004 fue asesinado, supuestamente en una riña al interior de la Ex Penitenciaria de Santiago, Julio Huentecura Llancaleo. Luego de haber sido detenido en Osorno, fue trasladado a Santiago no reconociéndole su condición de preso político. Julio jamás debió ser puesto junto a los reos comunes.

6. Zenén Alfonso Diaz Nécul (2005)
El año 2005 fue atropellado por un camión forestal Zenén Díaz Necul de 17 años durante un corte de la ruta 5 sur. Hasta ahora nadie ha sido procesado por el hecho.

7. Jose Gerardo Huenante Huenante (2005)
Durante la madrugada del 3 de septiembre de 2005 Jose Huenante Huenante, de 16 años de edad, fue subido al radio patrulla (RP) N°1375 perteneciente a la 5.ª Comisaría de Puerto Montt. Eso fue en plena Avenida Vicuña Mackenna. Desde entonces se desconoce su paradero.

8. Lonko Juan Lorenzo Collihuin Catril (2006)
Durante un allanamiento ocurrido en 2006 en el sector de Bollilco Grande, Nueva Imperial, fue asesinado el Lonko Juan Collihuin Catril por el sargento Luís Mariman. Al lugar llegaron carabineros acompañados por un grupo de civiles, no contaban con orden judicial y ocurrió de madrugada.

9. Matias Valentin Catrileo Quezada (2008)
Durante la noche del 3 de enero de 2008, un grupo de 30 comuneros Mapuche ingresaron al fundo Santa Margarita, de la comuna de Vilcún, que está a nombre de Jorge Luchsinger y es reclamada por la comunidad Lleupeco Vilcún. Al percatarse de la fuerte dotación policial del sector, el grupo comenzó a quemar fardos de pasto. Según el audio entregado por la Central de Comunicaciones de Carabineros (CENCO) los comuneros sólo estaban atacando con piedras. Es ahí cuando se escucha la orden, “métele un balazo”. El cabo Walter Ramírez acusa recibo y dispara su subametralladora UZI. Una bala entra por la espalda en el pulmón de Matías Catrileo, estudiante de agronomía de la UFRO. Muere minutos después.

Durante el primer gobierno de Michelle Bachelet

10. Johnny Cariqueo Yañez (2008)
Johnny Cariqueo Yañez murió de un infarto el 31 de marzo del 2008, tras una brutal golpiza propinada por carabineros del GOPE y de la Comisaría 26º de Pudahuel , minutos después que fuera inaugurada en esa comuna la plaza “29 de marzo”, dedicada a los luchadores sociales caídos en dictadura y en democracia.

11. Jaime Facundo Mendoza Collío (2009)
En 2009 resulta muerto Jaime Mendoza Collio, durante la ocupación del fundo San Sebastián por parte de su comunidad. El autor de los disparos, el cabo Patricio Jara Muñoz, alegó legítima defensa, presentando su casco y chaleco antibalas con numerosos impactos de balines. Un informe de la Policía de Investigaciones confirmó que dichos impactos habían sido hechos de manera posterior.

Durante el gobierno de Sebastián Piñera

12. Rodrigo Melinao Lican (2013)

Rodrigo Melinao Lican, de 26 años, de la comunidad Rayén Mapu del sector de Lolokos, fue encontrado muerto en la madrugada del 6 de agosto del 2013 al interior de la parcela Nº4 del sector Chiguaihue, en Pidima. Fue asesinado con un disparo de escopeta a corta distancia en el tórax.

Segundo gobierno de Michelle Bachelet

13. José Mauricio Quintriqueo Huaiquimil (2014)
José Mauricio Quintriqueo Huaiquimil, de 32 años, murió en la mañana del 1 de octubre del 2014 tras ser intencionalmente atropellado con un tractor por un inquilino del fundo Nilpe, en la comuna de Galvarino.

14. Victor Manuel Mendoza Collío (2014)
Victor Manuel Mendoza Collío, Werkén de su Lof Manuel Pillan y primo de Jaime Mendoza Collio, falleció el 29 de octubre del 2014 después de que dos desconocidos llegaron a su casa, en el sector de Pidima, Ercilla, y le dispararon un tiro al tórax en presencia de su hija de 6 años de edad.

Segundo gobierno de Sebastian Piñera

15. Camilo Catrillanca (2018)
Nieto del lonko de la comunidad Ignacio Queipul Millanao del Lof Temucuicui, Juan Catrillanca. Falleció por un disparo en la cabeza emanado por funcionarios del Comando Jungla instaurado por el gobierno de Sebastián Piñera, mientras regresaba a su hogar en tractor.

domingo, 11 de noviembre de 2018

MILITARES ASESINOS DE PINOCHET SON PUESTOS EN LIBERTAD

Liberan en Chile a condenados por crímenes de lesa humanidad

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Santiago. Familiares de víctimas de la dictadura de Augusto Pinochet y activistas de derechos humanos protestaron este miércoles la decisión de la Corte Suprema de liberar a siete condenados por crímenes de lesa humanidad.
Decenas de personas portando fotografías de víctimas de la dictadura se manifestaron fuera del edificio de la Corte Suprema en Santiago, acusando a la autoridad judicial de haber favorecido "la impunidad" tras otorgar la libertad condicional a seis militares y un policía retirados, quienes purgaban diferentes condenas en dos penales de la capital chilena.
La liberación "da la espalda al derecho internacional y violenta tremendamente a quienes hemos luchado por cimentar el nunca más", indicó un comunicado de la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos de Chile, difundido en medio de la protesta.
La Corte Suprema acogió varios recursos de amparo para otorgarles la libertad condicional tras establecer que los ex uniformados cumplían con los requisitos legales y no existían impedimentos para otorgarles dicho derecho después de que habían cumplido gran parte de sus condenas por crímenes de lesa humanidad.
Este miércoles, la justicia ordenó la liberación del coronel retirado Moisés Retamal, condenado a seis años de cárcel por el secuestro calificado de tres ciudadanos uruguayos en 1973; y del exbrigadier del Ejército, Emilio de la Mahotiere, condenado a tres años y un día como cómplice y encubridor de asesinatos de opositores de la dictadura. Ambos ya habían cumplido más de la mitad de su condena.

Texto tomado de LA JORNADA.

jueves, 18 de febrero de 2016

CIVILES MILLONARIOS TRAS EL GOLPE DEL 11 DE SEPTIEMBRE



Por Federico López.

En la madrugada del 11 de septiembre de 1973, no solamente los jefes militares golpistas contaban expectantes los minutos. También esperaban tensamente los empresarios, políticos y dirigentes gremiales que estaban en el secreto de la conspiración. Entre ellos, los "generales civiles" del golpe: una cincuentena de personas que desde hacía tres años buscaban el derrocamiento de Allende y la destrucción de la Izquierda. Algunos, incluso, venían de antes del 4 de septiembre de 1970, cuando el candidato de la Unidad Popular venció por casi cuarenta mil votos al abanderado de la derecha, el empresario y ex presidente de la República, Jorge Alessandri Rodríguez. En una base de la Fach, en el sur del país, esperaba Pablo Rodríguez Grez, jefe de Patria y Libertad, que había ingresado clandestinamente al país tres días antes desde Ecuador. El presidente del Senado y líder de la Democracia Cristiana, Eduardo Frei Montalva, había sido advertido que el golpe tenía fecha y hora. En la tarde del domingo 9, el general Sergio Arellano Stark, muy cercano a la DC y uno de los hombres claves en la organización del levantamiento, se lo había dicho a tres conspicuos personajes: Jorge Fontaine Aldunate, hermano de Arturo, subdirector de "El Mercurio" y presidente de la Confederación de la Producción y el Comercio; al senador democristiano Juan de Dios Carmona y al coronel (r) Alberto Labbé Troncoso, ex director de la Escuela Militar, ligado a sectores ultranacionalistas. En la tarde del lunes 10, Arturo Fontaine y René Silva Espejo, director de"El Mercurio" se constituyeron en la Editorial Lord Cochrane para preparar una edición de emergencia del diario para el caso que no pudiera imprimirse en los talleres de calle Compañía. Fue alertado un grupo de periodistas. También lo sabían Jorge Alessandri y su cuñado Arturo Matte Larraín, jefe del grupo económico dueño de la Papelera, de plantas de celulosa y de otras grandes empresas.

A través de la Armada conocían el "día decisivo", el senador DC Juan Hamilton y también altos dirigentes de derecha. Los senadores del Partido Nacional, Sergio Onofre Jarpa, Pedro Ibáñez- empresario poderoso y de gran influencia en el ámbito de los negocios- y Francisco Bulnes Sanfuentes, también sabían lo que se avecinaba. Por sobre civiles y militares, la mirada vigilante del gobierno de Richard Nixon. Las agencias de inteligencia trabajaban febrilmente. Los barcos de la Operación Unitas se acercaban a la costa chilena y un puente radial entre barcos chilenos y norteamericanos se puso en acción. En la Misión Naval de Estados Unidos, en Valparaíso, había emergencia bajo la dirección del capitán de navío Patrick Ryan. Dos días antes, en Washington un eufórico Henry Kissinger, secretario de Estado, había dicho al embajador norteamericano en Chile, Nathaniel Davis: "por fin tenemos andando un golpe militar en Santiago".

Civiles, militares y funcionarios norteamericanos coincidían. Había que derrocar a Allende. La resolución era absoluta. Debía correr sangrte a raudales para eliminar toda resistencia desde el primer momento e impedir para siempre el surgimiento de una alternativa de Izquierda. En los muros de Santiago se multiplicaban los grafitti: "Jakarta viene" aludiendo a la represión militar en Indonesia que a mediados de los años sesenta causó cerca de un millón de víctimas.


UNA HISTORIA ANTIGUA


El triunfo de Allende en 1970, cayó como bomba en Washington y en Chile dejó estupefacta y aterrorizada a la derecha. Agustín Edwards Eastman, dueño de "El Mercurio", huyó a Estados Unidos y fue figura importante en las decisiones de Nixon para desestabilizar el gobierno de la Unidad Popular. Entre el 4 de septiembre y el 3 de noviembre las conspiraciones se multiplicaron. Incluso hubo -según afirma Seymour Hersh, periodista norteamericano-, un plan para asesinar a Allende. Los agentes norteamericanos contaron con financiamiento y apoyo de las grandes empresas mineras -Anaconda, Kennecott- y de la ITT

Agustín Edwards presentía la posibilidad del triunfo de la Izquierda desde mediados del gobierno de Frei. En 1966, un diplomático chileno en Buenos Aires, Mario Valenzuela, había sospechado de la actuación de Edwards en la exacerbación del sentimiento antiargentino luego del incidente fronterizo de Laguna del Desierto en que murió el teniente de Carabineros Hernán Merino. Una situación conflictiva con Argentina podía debilitar el gobierno de Eduardo Frei, dudoso a esas alturas para Estados Unidos, y desembocar eventualmente en un golpe de Estado anticomunista. Edwards fue también simpatizante del general Roberto Viaux y del "tacnazo" de fines del año 69, con clara orientación fascistoide. Años más tarde, Patricio Aylwin declaró que estaba convencido que Edwards trató de conseguir apoyo norteamericano para Viaux y sus propósitos golpistas.

Agustín Edwards no era el único. Un sector importante de la derecha estaba convencido de la necesidad de un golpe militar para aplastar a la Izquierda. Jugaron a Alessandri, sin olvidar la otra opción. El propio programa del candidato empresarial llamado "La Nueva República", planteaba el libre mercado y un proyecto refundacional. El entonces diputado DC, Luis Maira pensaba que si triunfaba Alessandri habría un golpe institucional para cancelar el proceso de cambios democráticos en marcha.

Se trataba de impedir la llegada de Salvador Allende a la presidencia de la República. Al precio que fuera. En el entorno íntimo del derrotado candidato Jorge Alessandri dos ingenieros -Edgardo Boetsch García-Huidobro y Ernesto Pinto Lagarrigue- trataron de impulsar el plan que los norteamericanos llamaron Track I. Alessandri debía ser elegido por el Congreso Pleno y como presidente electo renunciaría para provocar otra elección presidencial en que Eduardo Frei Montalva sería candidato único de la DC y de la derecha. Al fracasar la maniobra, se abrió paso el Track II que culminó con el asesinato del general René Schneider, comandante en jefe del ejército, en que participó un grupo de ultraderechistas, entre ellos un sobrino del senador Francisco Bulnes, del partido Nacional (PN).

Muchas maniobras se discutían y tramaban en actividades sociales. Desde 1968 funcionaba la Cofradía Náutica del Pacífico Austral organizada por Hernán Cubillos, ex oficial naval, y ahora empresario, en que participaban los almirantes José Toribio Merino, Patricio Carvajal, Arturo Troncoso, Roberto Kelly, ex capitán de navío, con buenos contactos con los servicios de inteligencia de Estados Unidos, Agustín Edwards y René Silva Espejo. Este último sería muy útil para los contactos golpistas con oficiales del ejército y la Fach mientras Cubillos mantenía interlocución privilegiada con la Armada. Cuando Edwards se marchó a Estados Unidos, fue designado Comodoro de la Cofradía Náutica el almirante José Toribio Merino

Militares en retiro y grupos terroristas se mezclaban en acciones más o menos desesperadas. El general (r) Héctor Martínez Amaro -padre de un oficial naval, Jorge Martínez Busch-, era uno de los más activos. En otro grupo terrorista que colocó bombas y organizó atentados, figuraba un joven estudiante de Ingeniería, hijo de un oficial naval en retiro, Enrique Arancibia Clavel, que debió ocultarse después del asesinato del general Schneider.

Más allá de la coyuntura, surgió un movimiento fascista novedoso: Patria y Libertad, creado a los pocos días del triunfo electoral de Allende por el abogado Pablo Rodríguez Grez, que llamó a resisitir y a derrocar al marxismo. Al año siguiente se convertiría en Frente Nacionalista, con estructuras públicas y secretas y acentuada vocación paramilitar y terrorista.

Fracasado el Track II, la derecha se convenció que debía aceptar -aparentemente- el gobierno constitucional de Salvador Allende. Pero no dejó de conspirar. Las asociaciones de empresarios estaban dispuestas a todo. En una de ellas, la Confederación de la Producción y el Comercio, estaba Jorge Fontaine y en la más antigua, la Sociedad Nacional de Agricultura, el liderazgo correspondía a Benjamín Matte de tendencias fascistas, dueño de la empresa agroindustrial ULA. Pero era necesario, por un lado cohesionar a los empresarios, y por otro ampliar el movimiento a otros gremios y colegios profesionales hasta levantar un movimiento para derrocar a Allende. En el plano político había que juntar a la derecha con la Democracia Cristiana. Hacia allá se orientaron los conspiradores.


ROL DE LA SOFOFA


Eugenio Heiremans Despouys, era un empresario metalúrgico que había visto quebrar a su empresa, Socometal y estaba cambiando de giro. Desde un primer momento se planteó el derrocamiento del presidente constitucional. Conocía a un empresario joven y buen organizador: Orlando Sáenz, que presidía a los industriales metalúrgicos. No estaba vinculado a los grandes grupos económicos ni a empresas extranjeras, condiciones que Heiremans consideraba esenciales para el papel que le propuso. Sáenz aceptó presidir la Sociedad de Fomento Fabril y a los pocos meses se convenció de que Allende cumpliría el programa.

Por lo tanto había solamente una salida: derrocarlo a cualquier precio. En septiembre de 1971, la Sofofa organizó un seminario en Viña del Mar. Era el pretexto. Se reunieron los empresarios más importantes y decididos: Javier Vial, del grupo Los Pirañas, Hernán Cubillos, Ernesto Ayala, de la Papelera, Eugenio Heiremans, Jorge Fontaine, etc. Sáenz fue categórico y convincente. Había que prepararse para una "guerra" que no sería fácil ni corta. Había que actuar en consecuencia con planes, estrategia y estructuras. Se crearon departamentos: desde estudios a inteligencia. Después vendría el dinero, incluyendo dólares que llegarían, sin ninguna duda.

A comienzos de 1971, el economista Sergio Undurraga empezó a hacer estudios técnicos para la Sofofa. En "El Mercurio" actuaba un grupo reclutado por Edwards: el economista Sergio de Castro, Hernán Cubillos, Roberto Kelly y el abogado Carlos Urenda, ligado a los mayores grupos económicos.

El año 1971 fue exitoso para el gobierno de Allende. Ganó las elecciones municipales con más del 50% de la votación, casi 20 puntos más que los alcanzados en la contienda presidencial. La economía crecía rápidamente y mejoraba la vida de la gente.

Pero se acumulaban tensiones. Miles de mujeres de los sectores medio y alto salieron a las calles a comienzos de diciembre a protestar por una falta de alimentos que sólo ellas percibían. La "marcha de las cacerolas vacías" fue también el debut callejero de grupos de choque de Patria y Libertad y una expresión del odio que ahogaba a la derecha.

Al año siguiente las cosas empezaron a cambiar negativamente. Los efectos del bloqueo norteamericano y del sabotaje de empresarios y agricultores se hicieron sentir. En octubre un paro patronal, del comercio y de los transportes puso en jaque al gobierno. Fue derrotado por la movilización popular y también porque la derecha no lograba aún arrastrar plenamente a la DC. El general Carlos Prats encabezó el gabinete.

En esa época Sergio de Castro dijo algo que se recordó más adelante. "Echar a Allende no cuesta nada. Lo complicado es saber qué hacer con la economía".

Esa opinión quedó sonando en los oídos a Roberto Kelly. El ex capitán de navío pidió a Undurraga, a De Castro y a Emilio Sanfuentes que elaboraran un proyecto económico alternativo. Lo hicieron conforme a las orientaciones neoliberales aprendidas en la Universidad de Chicago por ellos y otros economistas jóvenes invitados al efecto. Fue el famoso "Ladrillo" preparado a petición de la Armada y que después del golpe sirvió de base para la implantación del modelo de libre mercado.

Entrevistado por la periodista Mónica González, el empresario Orlando Sáenz recordó que el movimiento empresarial y del comercio gastaba grandes cantidades de recursos: "Los dineros salieron de la empresa privada nacional y extranjera, pero más que nada externa. Yo mismo -agregó- hice contactos con sectores empresariales de otros países, a los cuales les debo lealtad y gratitud... En Europa, por ejemplo, trabajó un comité nuestro de tres personas... Pero, además, cada gremio llegaba con sus fondos. Le podría dar una nutrida lista de prohombres chilenos que hoy se expresan públicamente y que no tuvieron ningún empacho en recibir subsidios importantísimos para sus obras. ¿Sabe usted cuánto costó la campaña para salvar la Papelera, por ejemplo? Fueron cantidades enormes de dinero. Y sobre la base de allegar recursos, lo primero era tener medios de difusión. Teníamos una nónima de subsidios para treinta y tantas radios y más de veinte diarios a lo largo del país. Inventábamos publicidad. Era un ejército y toda esa actividad era necesaria. Nada más que la ?Sección Inteligencia? nuestra llegó a tener casi 70 personas. Y todos esos grupos funcionaban en un lugar que no tuviera relación con las organizaciones empresariales. Por ejemplo, donde se gestó el embrión del programa económico que aplicó Sergio de Castro fue en un departamento en los altos del Teatro Continental. Allí se instaló Sergio Undurraga, secretario ejecutivo de nuestro Departamento Técnico y comenzó a contratar economistas. El programa económico se demoró más de un año en elaborarse".

La situación se complicaba. Cientos de empresas fueron tomadas por los trabajadores en medio del paro de octubre. Patria y Libertad inició acciones de sabotaje. La derecha finalmente logró una alianza con la Democracia Cristiana que se lanzó también al camino de la confrontación. Las elecciones de marzo del 73 para elegir nuevo Congreso, fueron una derrota para la derecha. En el campo, latifundistas armados formaban los comandos "Rolando Matus" para oponerse a la reforma agraria. Muchos de sus integrantes participarían más tarde junto a militares y carabineros en masacres de campesinos e impondrían a sangre y fuego la pacificación en los campos después del golpe. Estados Unidos presionaba. En noviembre de 1972, la estación de la CIA en Santiago informaba al cuartel general que Patria y Libertad intensificaba su tabajo sedicioso, organizando a los opositores sin distinción. "Están organizados por cuadra. Mujeres y niños reciben instrucción en primeros auxilios y autodefensa, también en el uso de armas y fabricación de bombas molotov". Agregaba: "están entrenando personas para operar empresas eléctricas y de transporte público en caso de un golpe militar. Reciben apoyo económico y armas, del tipo ametralladoras y granadas de mano desde Brasil". Eran los comandos de Protección Comunal -los Proteco- que se extendieron por los barrios acomodados. Patria y Libertad preparaba también terroristas más sofisticados y decididos. En sus filas participaban Michael Townley, Mariana Callejas, Roberto Fuentes Morrison y otros personajes siniestros duchos en torturas y asesinatos.

La conspiración de los "generales civiles" -algunos de los cuales habían negociado a buen precio sus empresas con el gobierno-, llegaba a su culminación. Había que convencer a los militares. En el plano político, el Code sellaba la alianza entre la DC y la derecha. En el terreno paramilitar, estaban ya en condiciones de sostener una prolongada ofensiva terrorista con atentados y sabotajes. En el campo gremial, un arco amplísimo de organizaciones que iba desde colegios profesionales de médicos, ingenieros y abogados hasta dueños de camiones, pasando por empresarios, comerciantes y agricultores empalmó con la huelga de los mineros de El Teniente dirigidos por Guillermo Medina, sindicalista de origen DC que terminaría como miembro del Consejo de Estado de la dictadura. A fines de julio se inició un paro para derribar al gobierno. Miles de camiones se estacionaron en campamentos, con discreta protección de marinos y militares. El dinero yanqui afluyó a raudales. El 29 de junio se levantó el Regimiento Blindados con apoyo de Patria y Libertad y se aceleraron los preparativos para el golpe militar. Dirigentes sediciosos como León Vilarín, líder de los camioneros, Rafael Cumsille, de los comerciantes minoristas, y Julio Bazán de los Colegios Profesionales y Técnicos ocupaban las portadas de los diarios, mientras Jaime Guzmán comandaba el gremialismo protegido por las murallas de la Universidad Católica y con el apoyo del sacerdote Raúl Hasbún, director del Canal 13 de televisión.

El 22 de agosto la Cámara de Diputados con el voto derechista y de la DC, aprobó un proyecto de acuerdo redactado entre otros por los diputados Mario Arnello y Mario Ríos, del PN, y los DC, José Monares y Arturo Frei Bolívar, con el apoyo y estímulo de Luis Pareto, que declaró al gobierno al margen de la Constitución. Al día siguiente renunció el general Carlos Prats a la comandancia en jefe del ejército. El presidente Allende nombró en su reemplazo al general Augusto Pinochet, quien aparecía como el oficial más comprometido y leal con la legalidad y la Constitución.


¿QUE PASO CON ELLOS?


Los grandes, los "generales civiles" detrás del golpe ganaron la batalla y hasta ahora la guerra. Aparecieron poco, porque prefirieron mover sus peones civiles y militares. Pinochet dijo alguna vez que había que gobernar para los ricos porque ellos tenían la plata. Apellidos como Matte, Edwards, Claro, Luksic, Angelini, Yarur, Said, se oyeron mucho durante la dictadura. Y fueron escuchados. Los grupos económicos crecieron, la economía se transnacionalizó con enormes flujos de capital extranjero. Algunos grupos se reestructuraron. Otros cayeron en la crisis de comienzos de los 80, como Los Pirañas de Javier Vial y el conglomerado Cruzat. Surgieron nuevos grupos y aparecieron otros millonarios, casi todos ligados a las privatizaciones o a coyunturas como el peligro de guerra con Perú y Argentina. Como clase, la burguesía ganó enormemente con la dictadura. Abrió nuevos campos de negocios como la previsión -las AFP acumulan más de 30 mil millones de dólares pertenecientes a trabajadores- y la salud. También la educación. Y sacó capitales al extranjero. Con las organizaciones sindicales destruidas, los patrones acumularon riquezas y dinamizaron un modelo que -pasada la crisis de los 80, casi una quiebra general- logró importantes éxitos macroeconómicos, teniendo siempre la posibilidad de recurrir al Estado en caso de dificultades mayores. Ocurrió con el salvataje de los bancos a un costo de miles de millones de dólares.

Los agricultores recuperaron tierras y lograron someter a los campesinos y a los mapuche. Se libraron de los sindicatos agrícolas pero no pudieron reconstituir los latifundios. El capitalismo llegaba también al campo. Incluso debieron soportar el imperativo "¡cómanse las vacas!" que les lanzó un ministro de Pinochet cuando se quejaron de las políticas de precios que los marginaba del mercado.

Chile, entretanto, exhibe una de las peores distribuciones del ingreso en el mundo y muestra una sociedad quebrada en la cual los ricos manejan los resortes ocultos del poder.

Los conspiradores civiles son ahora demócratas. Son personalidades respetadas por amplios sectores. Agustín Edwards, Sergio Onofre Jarpa, Sergio Diez, Ricardo Claro, Sergio de Castro, Eugenio Heiremans y el propio Orlando Sáenz. Los personajes menores han sido olvidados. Muy pocos los relacionan con los crímenes, abusos y atrocidades de la dictadura
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(Texto tomado de la revista PUNTO FINAL y que fue publicado en marzo de 2001)



lunes, 9 de noviembre de 2015

FUEGUINOS EXHIBIDOS COMO ANIMALES EN PARÍS


Selknam llevados a París por Maître en1889.

Fueguinos en los zoológicos humanos


París, 1881: En septiembre de 1881, once fueguinos fueron exhibidos en el Jardín de Aclimatación, no se tiene claro si eran alacalufes oyaganes. Habían sido raptados en las costas del estrecho de Magallanes por Johann Wilhelm Wahlen, marino alemán. En los primeros días, la hija menor de uno de ellos murió. Luego de París fueron exhibidos durante tres semanas en Berlín, donde los alojaron en el recinto de las avestruces. La gira siguió rumbo aLeipzigMúnichStuttgart y Núremberg. Para entonces ya se encontraban bastante enfermos y camino a Zúrich murió una mujer apodada Grethe, la salud del resto del grupo estaba tan frágil que debieron cancelarse todas las presentaciones en Suiza.3 Fue en este momento cuando el empresario Carl Hagenbeck intervino y envió de regreso a Punta Arenas a los cinco sobrevivientes de la gira, ya que el responsable de llevarlos había dado un depósito de garantía por los indios. En el viaje murió el último, apodado Andrés. Así es cómo regresaron tan solo cuatro de los once.
En la representaciones que hicieron de este grupo, nada hacía señalar que eran canoeros, si no todo lo contrario, los representaron como nómades terrestres.
La presentación, representación e interpretación, lo que el ojo veía era lo que la mente pensaba, así la mente estaba gobernada por los sentidos. Las fotografía tomadas y los grabados e ilustraciones realizados a partir de aquellas exposiciones fueron tomadas como verdaderas y adquirieron carácter científico con enfoque antropológico.
París, 1889: Desde el 6 de mayo hasta el 31 de octubre se celebró en París el centenario de la revolución en una Exposición Universal. En el marco de la celebración de igualdad, fraternidad y libertad, se exhibieron once indígenas selknamMaurice Maître4 raptó en la bahía San Felipe a toda una familia, a quienes llevó atados con cadenas. De los once, dos murieron en el viaje.
Fueron presentados tras rejas como caníbales, todas las tardes les arrojaban carne cruda de caballo y los mantuvieron sucios y sin posibilidades de higiene, para que tuvieran la apariencia de salvajes, todo para obtener beneficios comerciales. Ante las inhumanas condiciones de la exposición la S.A. Missionary Society comenzó a exigir la liberación y el retorno de esta familia a Tierra del Fuego. Fue tal la presión que obligó a Maître a cancelar la gira por Inglaterra y se fueron a Bélgica.5
De los once selknam solo siete llegaron con vida a Petit-Carmes en Bélgica. Una vez en Bruselas fueron exhibidos en el Musée du Nord, el cual ofrecía una amplia variedad de atracciones, desde equipos electrónicos hasta obras de teatro con actores enanos. Fue en este contexto que el grupo de siete selknam fueron encarcelados por la policía belga en la sección de extranjeros. Tras este episodio, Maître y el grupo de selknam, volvieron a Inglaterra desde donde se embarcaron de regreso a Tierra del Fuego. De los once regresaron seis.6

Mapuche en los zoológicos humanos[editar]

París, 1883. Mapuche En junio dos familias de Mapuche fueron exhibidas en el Jardín de Aclimatación: un grupo de seis hombres, cuatro mujeres y cuatro niños. Fueron llevados hasta el lugar por el alemán Richard Fritz y según los registros había participado en un guillatun en la comunidad de estas familias, lo que indica un nivel de cercanía, por ende que no fueron llevados hasta Europa por la fuerza. Durante la exposición en París la representación se hizo a través del juego del palín y por el uso de sus instrumentos, sobre todo por el sonido de la trutruka. Después de París, la gira continuo rumbo al zoológico de Berlín y a una feria navideña en Hamburgo y en el palacio de la moneda (Chile). En términos etnográficos, la Sociedad de antropología de la metrópoli belga, recalcó en numerosas ocasiones lo reacios que eran para ser medidos y fotografiados para fines científicos.7

El legado de los zoológicos humanos[editar]

Campamento Tuareg en la exposición de 1907 en Paris.
El concepto de zoológico humano no ha desaparecido completamente; a pesar de la "Declaración Universal de los Derechos Humanos" de1948.
Una ciudad congolesa se inauguró en la Exposición General de primera categoría de Bruselas (1958) o Expo 58.8 Una aldea africana fue inaugurada en el Zoo de AugsburgoAlemania en julio de 2005.9
En agosto de 2005, el London Zoo exhibió a participantes voluntarios desnudos.10
En 2007, el Zoo de Adelaida corrió una «Exhibición de Zoo Humano» consistente en un grupo de gente que, como parte de un ejercicio de estudio, simulaban el encierro de un primate durante el día, y retornaban a sus hogares de noche. Los habitantes tomaban parte en varios ejercicios, con mucho de divertimento para los que miraban, que eran invitados a donar para nuevos encierros.

Véase también[editar]

Bibliografía[editar]

  • Zoos humains, obra colectiva bajo la dirección de Nicolas Blancel, Pascal Blanchard, Gilles Boetsch, Éric Deroo & Sandrine Lemaire - Paris, La Découverte, 2002
  • Báez, Chistian, Mason, P. “Zoológicos humanos. Fotografías de fueguinos y mapuches en el "Jardín de Aclimatación de París", siglo XIX”. Pehuén Editores, Santiago, Chile, 2006

(Texto tomado de la Enciclopedia virtual WIKIPEDIA).

sábado, 25 de julio de 2015

ASÍ LOS ESBIRROS DE PINOCHET ASESINARON A RODRIGO ROJAS DENEGRI Y DEJARON HERIDA A CARMEN GLORIA QUINTANA

Caso Quemados

El caso Quemados hace referencia a un episodio ocurrido el día 2 de julio de 1986, teniendo como contexto la lucha callejera contra el régimen militar de Augusto Pinochet enChile.
Un grupo de militares comandado por oficial Pedro Fernández Dittus, que patrullaba las calles en el marco de una jornada de protesta Nacional, interceptó y tras golpear, rocían con combustible y queman a dos jóvenes: Carmen Gloria Quintana y al fotógrafo Rodrigo Rojas De Negri quien trabajando para una agencia internacional seguía al grupo para fotografiarlo, luego les trasladan y abandonan en un sitio eriazo en Quilicura en la periferia de la ciudad. Rojas posteriormente fallecerá. El hecho, por su crueldad más las absurdas sentencias judiciales, motivó protestas contra el régimen tanto nacionales como internacionales, principalmente de Estados Unidos, lugar de residencia de Rojas.

Descripción de los hechos[editar]

Testimonio manuscrito de Carmen Gloria Quintana del atentado en su contra. Colección delArchivo Nacional de Chile..
La oposición a Pinochet tenía gran esperanza en que el año 1986 seria "El año de la victoria" y programó una serie de jornadas de protestas que debían coronarse en un gran paro nacional para el 2 y 3 de julio de dicho año. En todas las poblaciones los grupos políticos opositores se prepararon. La respuesta del gobierno fue enviar militares a patrullar las calles para mantener el control.
En el barrio de Los Nogales, en la comuna de Estación Central de Santiago, un pequeño grupo de personas que estaba preparando una barricada en un sector estratégico de la comuna durante la mañana del día 2 de julio. Esa mañana el fotógrafoRojas De Negri, quien trabajaba para una agencia internacional que cubría la noticia del paro acompañó al grupo. Las personas llevaban 5 neumáticos usados y un galón de gasolina. A las 8 de la mañana, fueron interceptados en Avenida General Velásquez con calle Hernán Yungue por una patrulla militar comandada por el teniente Pedro Fernández Dittus, la cual estaba compuesta por 3 civiles, 5 suboficiales y 17 soldados. La mayoría de los jóvenes lograron escapar menos Quintana y Rojas De Negri.
Los militares rociaron a los dos jóvenes con gasolina, y les prendieron fuego. Estando ambos jóvenes en llamas e inconscientes, miembros de la patrulla los envolvieron en mantas, los cargaron en un vehículo militar y los condujeron a un camino aislado en las afueras de Santiago, a más de 20 kilómetros de distancia. Allí, en una zanja de regadío los arrojaron y los dejaron para que murieran. Algunos trabajadores agrícolas los encontraron, y los jóvenes fueron llevados a un hospital público para su atención.
Quintana y Rojas De Negri fueron trasladados más tarde a otro hospital, pero Rojas De Negri murió cuatro días más tarde debido a la gravedad de sus heridas. Pese a las quemaduras de segundo y tercer grado que sufrió Carmen Gloria Quintana en un 62% de su cuerpo, con muchos dientes rotos (estuvo entre la vida y muerte durante semanas), finalmente sobrevivió.Quintana se sometió a un largo tratamiento médico en Chile y Canadá, pero todavía tiene cicatrices que la desfiguran a consecuencia de sus quemaduras.1

Resoluciones judiciales[editar]

Si bien la prensa oficialista y las presiones del gobierno primero intentaron negar los hechos y luego intentaron mantener la vigencia de la versión militar, los reclamos desde gobiernos y organismos de derechos humanos llevará a judicializar el asunto, se designó al juez Alberto Echavarría Lorca para investigar los hechos quien el día 23 dictaminó:
a) que Rodrigo Rojas De Negri y Carmen Quintana Arancibia fueron detenidos el día 2 de este mes por una patrulla militar que aseguraba el libre tránsito de vehículos, reteniéndoseles transitoriamente en el lugar de su aprehensión, uno al lado de la otra y próximos a elementos de fácil combustión, combustión que se produjo debido a un movimiento de la joven y la caída y rotura del envase de uno de esos elementos, causando quemaduras graves a los dos y originando posteriormente la muerte del primero; y b) que no se dispuso lo conveniente para la inmediata atención médica de los afectados, sino que se les dejó en libertad después de transcurridos unos momentos en un lugar y en condiciones no propicias para obtener esa atención.
Por esta razón, la resolución del juez fue dejar en libertad a los militares implicados. Según el informe de Amnistía Internacional de ese año, los testigos y los abogados de las víctimas recibieron amenazas de muerte (tres testigos debieron abandonar el país).2
Ante las críticas y presiones, un tribunal militar el 3 de enero de 1991 sólo encontró al oficial Fernández Dittus culpable de negligencia, por negarle asistencia médica a Rojas, pero le exoneró de cualquier responsabilidad en la incineración de Quintana.3
Sólo será en 1993, cuando la Corte Suprema condene a Fernández Dittus a 600 días en prisión por su responsabilidad en la muerte por quemaduras de Rojas De Negri y las quemaduras serias recibidas por Quintana. En octubre de 2000 un tribunal ordenó que el Estado chileno le pagara 251.7 millones de pesos a Quintana (sobre U$500,000) en compensación.

Reapertura del caso en 2015[editar]

En julio de 2015 el ministro Mario Carroza dictó siete órdenes de detención en contra de funcionarios militares involucrados en el caso. La aparición de Fernando Guzmán, como un testigo clave, quien fue uno de los conscriptos de la patrulla militar, brindó los antecedentes claves para avanzar en la resolución del caso. 4 5 Dicho conscripto reconoció que, en ese momento, fue presionado a dar una declaración falsa a la justicia militar. 6

El caso en la cultura popular[editar]

"Para Seguir Viviendo" (fragmento)

"(...)Las llamas que trae el viento
Y que mi sudor no apaga
Levantan una muralla
Con bencina y con metralla (...)
Rodrigo Rojas en llamas
Tu voz seguirá viviendo"
Illapu
  • El grupo musical chileno Illapu le dedicó la canción "Para seguir viviendo", inserta en el disco homónimo del año 1986.
  • El dramaturgo Francisco Aravena y la compañía Contragolpe se inspiraron en este dramático episodio para crear la obra teatral “General Velásquez 86”. Elaborada en clave documental la obra intenta mostrar "las múltiples voces que contaron la historia: los implicados y testigos, las autoridades político-militares, el poder judicial y los medios de comunicación".9

(TEXTO TOMADO DE WIKIPEDIA).